- Para mejorar nuestra educación y la de nuestros hijos.
- Para que las personas mayores y con dependencia tengan una mejor atención.
- Para vivir más años y con mejor calidad de vida.
- Para tener mayores oportunidades de acceder a un empleo de calidad.
- Para aumentar el nivel de renta de nuestros agricultores y ganaderos.
- Para que nuestras empresas puedan competir mejor y acceder a nuevos mercados.
- Para que nuestros hogares, calles y pueblos sean espacios más seguros.
- Para igualar las oportunidades entre las ciudades y los pueblos.
- Para poder tener una administración eficiente y terminar con la burocracia infame.
- Para poder hablar y entendernos con cualquier persona del mundo sin saber idiomas.
1000 razones más para hacerlo ya.
Y si te parecen pocas las razones anteriores, te podría añadir a la lista otro millar para mostrarte cómo te va a afectar y mejorar tu vida (acceso a servicios financieros, teletrabajo, telemedicina, educación en línea y personalizada, ocio inmersivo, automatización de tareas, conducción autónoma de vehículos, evitación de fraudes, anticipación de riesgos, transporte más seguro, optimización de tu tiempo, ahorro de costes, ayuda en tu toma de decisiones, ayuda en tus tareas creativas – diseño de imágenes, escribir artículos, componer música-, seguridad en el trabajo, personalización de los servicios a tus clientes, escritura de código de programación… e incluso te puede ayudar a encontrar pareja).
Inteligencia Artificial para abordar desafíos globales.
Y si nos pusiésemos en actitud magnánima y filantrópica, podríamos añadir algún centenar más de bondades que afectan a nuestras vidas y a las futuras generaciones (lucha contra el cambio climático, incremento en la producción de alimentos, salud global y producción de nuevos fármacos, mejora de la eficiencia energética, producción y distribución de energía de fuentes renovables, sistemas educativos accesibles para todos y de calidad…).
Tú puedes convertirte en usuario y operar con Inteligencia Artificial en los próximos 10 minutos.
Pero, pongámonos por un momento en modo de ciudadanos de a pie y veamos qué podemos hacer ahora mismo con una Inteligencia Artificial primaria como ChatGPT, por ejemplo: escribir un poema, un artículo, un libro, crear un plan de estudios, un chatbot, una estrategia de marketing, un plan de negocios, mejorar habilidades de escritura, procesamiento de lenguaje natural, análisis de datos … y millones de cosas más. Pues todas esas cosas y muchas más puedes empezar a hacerlas ahora y convertirte en usuario, en 10 minutos, sólo necesitas registrarte aquí: https://chat.openai.com.
En poco tiempo la mayoría de la humanidad estará usando y aplicando la Inteligencia Artificial.
El otro día, en una entrevista, me pidieron que diera un ejemplo de una actividad donde se aplicaba la Inteligencia Artificial, y ante la tardanza en la respuesta y la inquietud de mi interlocutor, le respondí que estaba pensando en una actividad donde no estaba implicada y por mucho que pensaba no encontraba ninguna.
En poco tiempo, igual que usamos internet, estaremos operando con Inteligencia Artificial en nuestros trabajos y resto de actividades diarias.
¿Todavía necesitas más argumentos para que la IA esté en la agenda pública?
Y si todavía no tienes suficientes razones para que la Inteligencia Artificial ocupe las más altas tribunas de los parlamentos y las agendas de gobiernos y organizaciones, podría seguir bombardeándote con otros miles de ejemplos.
Pero todo este argumentario no puede hacernos caer en la complacencia y el optimismo inocente, porque toda tecnología revolucionaria trae ventajas e inconvenientes, y esta no será la excepción. Por eso tendremos que actuar de manera ética, promoviendo un marco jurídico y normativo que permita avanzar de manera segura, pero sabiendo que no podemos poner puertas al campo y que la Inteligencia Artificial se impondrá.
Si una sociedad o un gobierno se empeñan en ponerle freno, lo único que estarán haciendo es privar de oportunidades a sus ciudadanos en nombre de una seguridad total que no existe. Aunque losriesgos son evidentes (desaparición de puestos de trabajo, pérdida de control, pérdida de privacidad, manipulación de información y amenazas a la democracia, armas autónomas, suplantación de identidades para comisión de delitos, brechas sociales, cambios existenciales en la naturaleza humana…), la única alternativa es lidiar con ellos para minimizarlos.
En los próximos años, la Inteligencia Artificial va a progresar de manera imparable, siendo tarea de las organizaciones multilaterales y los gobiernos velar por limitar las amenazas.Y de una vez por todas tenemos que entender que todos podemos ser artífices y protagonistas de esta revolución, utilizándola para crear cosas bellas y buenas y trabajando para que en su implantación “ganen los buenos”.
Por todas estas razones hay que apoyar a los gobernantes que de forma valiente asumen el liderazgo y toman la responsabilidad de abordar su implantación y desarrollo; así como la labor didáctica que es necesario acometer para hacer partícipe a la ciudadanía en un gran proyecto colectivo e inclusivo.
De una vez por todas tenemos de entender que hemos entrado en una nueva era de la humanidad (Virtuceno) donde la Inteligencia Artificial se convierte en uno de los rasgos más definitorios de su identidad.
Adelante!!!
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