RESUMEN DEL ARTÍCULO
Sigue leyendoSi deseas producir algo nuevo, concentra elementos (personas, recursos, tecnologías…) y agítalos. Como resultado, se generará algo innovador (economía, valor, tendencias, nuevas realidades, escenarios de futuro…).
¿Y si tuviésemos ante nuestros ojos los dos principales ingredientes que provocan el cambio? ¿Y si aprendemos a manejarlos a nuestro favor? Esto nos ayudaría a ver los cambios con cierta antelación, anticipar las tendencias, descubrir las posibilidades y oportunidades que surgen de ellas, y lo más importante: convertirnos en activistas, creadores, innovadores, emprendedores y líderes.
El principio de “concentra y agita” funciona en todos los campos y está en la base de cualquier transformación, cambio o tendencia. Se manifiesta en los ámbitos de la física y el universo, el surgimiento de la vida, así como en el nacimiento de las sociedades y las civilizaciones.
Está presente en las 10 megatendencias que mueven el mundo: cambio climático y transición ecológica, aumento de la población, crecimiento de las megalópolis y desiertos demográficos, envejecimiento y cambios demográficos, cuarta revolución industrial y convergencia NBIC, transformación del trabajo y las formas de vida humana, cambio de poder a escala global del Atlántico al Pacífico, lucha por el control de los alimentos, el agua y las materias primas, brechas sociales, polarización y conflictos, inmaterialización (del mundo físico al metaverso), y extensión de la vida humana (longevidad) y salud.
El Antiguo Egipto, el Imperio Romano, la Revolución Francesa, la Revolución Industrial, la Inteligencia Artificial, la creación de las primeras ciudades, la navegación, el comercio, las universidades, la conquista del espacio, la pandemia del coronavirus y la aceleración de su vacuna, así como cualquier realidad relevante, tienen su origen en los principios de concentración y agitación, que están en la base de su gestación y eclosión.
“Concentra y agita”, es la fórmula mágica para hacer historia.
Adelante!!!