Hemos elaborado para ti una serie de sencillas prácticas a partir de los conocimientos y aportes que los Grandes maestros del management han realizado al desempeño de la organización, de manera que los puedas aplicar en la operativa a tu trabajo, tu organización y tu vida; en el compromiso de ayudarte a conseguir un crecimiento permanente y el logro de resultados.
Bonita palabra, todo tipo de organizaciones (políticas, sociales, empresas…) la reivindican, pero quienes hacen bandera de ella deberían conocer sus consecuencias.
La participación implica cesiones y corresponsabilidades. Cuando te digo que partícipes conmigo debo hacerme cargo del compromiso que asumo, pues te otorgo capacidad de decisión, influencia y responsabilidad.
Por qué unas personas y organizaciones consiguen resultados y otras no. Qué elementos están presentes en la efectividad y la transformación humana. Cuál es la relación entre esos elementos.
Una comprensión global para explicar el cambio histórico, el cambio personal y de las organizaciones. Vamos a intentar establecer la ecuación que nos ayude a cambiar la realidad y conseguir los resultados que queremos, para desarrollar nuestro máximo potencial de transformación en relación con los elementos críticos para hacerlo, recursos y confianza.
Tengo algunas intuiciones sobre esa ecuación pero necesito tu ayuda para cuadrarla porque solo no puedo (y además soy de letras y estoy más cerca de la filosofía del lenguaje que del pensamiento cartesiano). Estoy seguro que cuando la ecuación esté formulada y resuelta definitivamente, sin ser una receta, será de gran ayuda para el management.
¡Vamos al grano!
Veamos las variables que están presentes en el proceso de transformación y cambio de un ser humano, y por ende en la organización, que en esencia es una agregación de individuos.
Elementos estructurales del cambio (E).
Recursos para el cambio (R).
Donde T es el potencial de transformación, y C es la confianza.
E (D+C+Q+A+Ap) x R (cr+ce+cc+ca+ccl+ci+cl)
T = —————————————————————-
C
Analizando la ecuación.
Tener un deseo en la mente y la voluntad de llevarlo a cabo, sólo se puede materializar en la fuerte creencia de que podemos conseguirlo, generando con ello la suficiente energía para la acción y la emoción necesaria para el aprendizaje efectivo.
Partiendo de esas variables, los recursos necesarios para producir cambio, transformación, crear una organización o empresa, han quedado obsoleta la antigua interpretación marxista de capital. Los factores críticos para la producción no son el capital financiero, fábricas, terrenos, maquinaria, operarios… Los recursos transformadores son las capacidades para crear alianzas y relaciones sólidas, desarrollar fortaleza emocional, conocimientos técnicos aplicados, capacidad para desaprender y volver a aprender, hacer ofertas y satisfacer necesidades, producir valor innovador, desarrollar capacidades para un nuevo liderazgo y dirección…
De aquí deviene una nueva concepción del factor capital, entendido como los recursos necesarios para producir un cambio (económico, social, político, cultural …). Ahora el capital tiene otras formas y manifestaciones «recursivas» que están presentes y son accesibles en el seno de cualquier comunidad humana con capacidad para conversar de manera efectiva. El capital son relaciones, capacidades nuevas, innovación … Además, el nuevo capital es ubicuo, abundante, accesible…; frente al antiguo (escaso, concentrado, inaccesible…).
Por consiguiente, la capacidad de transformación en el nuevo tiempo en el que vivimos se ha democratizado.
Pero el factor que modula toda la capacidad de cambio es la constante de la CONFIANZA.
Si la confianza no existe (C=0), por mucho valor que sumen las variables descritas, la transformación, la revolución, el cambio, el logro, la empresa, la nueva organización… No se materializarán.
El crecimiento del valor de la confianza es lo que permite que las cosas nazcan, se muevan, crezcan y tengan éxito.
La mayor inversión que debemos hacer en los próximos años como comunidad, país y civilización es construir confianza, trabajándola desde todos los ámbitos de la acción humana (educación, empleo, cultura, salud…).
El cemento de la confianza cohesiona la arquitectura de las organizaciones sólidas y duraderas.
Todo en la vida nace por la confianza y se destruye con su deterioro. El amor nace y crece en la intimidad y la confianza. El odio, el resentimiento, la guerra o la crisis surgen por su pérdida. Las organizaciones, las empresas, las revoluciones, los emprendimientos, las innovaciones, los liderazgos…; aparecen cuando está presente.
¿Hay algo más importante en el mundo que la CONFIANZA?
El mayor destrozo en la sociedad, economía, convivencia se produce por la pérdida de confianza, cuando la gente deja de creer en las promesas fundacionales que constituyeron sus instituciones y organizaciones. En términos coloquiales lo llamamos crisis, cuando deberíamos hacerlo por su nombre.
La falta de confianza genera miedo, inseguridad, parálisis, resentimiento, codicia, egoísmo. La desconfianza es el factor que más costes sociales y económicos genera, es el predictor axiomático de la crisis.
Los principales costes de organización de la cosa pública están en función de preservar la confianza: policía, ejército, administración… Todo Nuestro ordenamiento jurídico trata de establecer reglas, pedidos y promesas para crearla (contratos, transacciones, relaciones, uniones personales…); velando por el cumplimiento de las promesas que nos hacemos y sancionando su incumplimiento.
Te imaginas una comunidad o un país donde todos confiasen en todos. Todos los costes por desconfianza se ahorrarían, desaparecerían los supervisores, la burocracia, la administración … las personas no perderían la mayor parte de su tiempo en protegerse y jugar a la defensiva, se abriría el camino para el emprendimiento, el liderazgo, la innovación, la colaboración, la cooperación…
¿Ahora dime si crees importante invertir en CONFIANZA?
Mira tu vida y enumera las cosas que no hiciste por falta de confianza. Mira tu mundo y observa como en la raíz de todos los problemas colectivos está la confianza. Cuando la gente no consume, no estudia, no emprende, no se responsabiliza, no cree…
Empieza a poner en práctica la ecuación para incrementar tu efectividad, reúne los elementos y recursos críticos, pero sobre todo, construye confianza, de ello dependerá tu potencial de transformación.
Adelante!!!!
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La confianza es el mayor activo de una persona o de una organización para producir valor. También es la base que sustenta el liderazgo. Si sabes crear y mantener la confianza tienes el principal capital para levantar tu causa.
¿Cómo siendo la confianza un bien tan preciado no hay «escuelas de confianza»? ¿Dónde se aprende? ¿De qué materias se compone su currículum? ¿Cómo puedo entrenarla?
Cuando decíamos renovarse o morir, podrías preguntarte, muy bien, yo quiero ¿pero cómo lo hago? Lo primero es que entiendas que una organización (institución, empresa, asociación, familia, religión, país, partido político…) no es otra cosa que una red de personas conversando.
